La educación superior está experimentando una transformación sin precedentes impulsada por el avance tecnológico y la demanda cambiante del mercado laboral. En este contexto, el IFC 9th Global Private Education Conference reunió a líderes de la industria y expertos en educación para discutir los desafíos y oportunidades que enfrenta el sector. Gabriel Hernández Erzisnik, Sales Director Latin America & Caribbean de Symplicity Corporation, participó activamente en las sesiones del evento. En esta entrevista, nos comparte sus reflexiones sobre las principales temáticas abordadas en la conferencia, así como recomendaciones clave para las universidades en un contexto de rápida transformación educativa.
¿Podrías compartirnos tu experiencia en el IFC 9th Global Private Education Conference?
Fue un evento inspirador y enriquecedor que me brindó nuevas perspectivas sobre el futuro de la educación. Tuve la oportunidad de compartir mi experiencia y conocimientos en áreas como la gestión de relaciones con los estudiantes, el desarrollo profesional y la empleabilidad. Puede conocer a líderes de la industria y establecer relaciones que puedan generar nuevas oportunidades de colaboración. Además, pude aprender sobre las últimas tendencias en educación privada y comprender mejor las necesidades de las instituciones educativas.
¿Qué te pareció la participación en general y qué temas te llamaron más la atención?
La participación fue excelente, especialmente en discusiones sobre el papel de la tecnología en la educación y la preparación de los estudiantes para el mercado laboral. Me impresionó la pasión y el compromiso de los participantes en encontrar soluciones innovadoras para mejorar la calidad de la enseñanza.
Estuviste en la sesión “Teaching and Learning New Frontiers”, ¿qué puedes comentar sobre esta y qué aprendizajes te llevaste?
Fue una de las que más me llamó la atención porque se discutieron las últimas tendencias y desafíos que enfrenta la educación en el mundo actual, y se exploraron nuevas formas de enseñar y aprender que están emergiendo gracias a la tecnología. La tecnología tiene un enorme potencial para transformar la educación. Puede usarse para personalizar el aprendizaje, brindar acceso a la educación a más personas y mejorar la experiencia educativa en general. Es importante que las instituciones educativas estén abiertas a la innovación y estén dispuestas a experimentar con nuevas tecnologías. La educación está cambiando rápidamente, y las instituciones que no se adapten a los cambios se quedarán atrás. Y los educadores tienen un papel fundamental que desempeñar en la transformación de la educación, deben ser los líderes en la adopción de nuevas tecnologías y en el desarrollo de nuevas formas de enseñar y aprender.
¿En esta sesión se mencionaron ejemplos o caminos hacia las nuevas fronteras del aprendizaje y la enseñanza?
Sí, se mencionaron varios ejemplos y caminos hacia las nuevas fronteras del aprendizaje y la enseñanza. Algunos de los más relevantes fueron, el aprendizaje personalizado, el aprendizaje a distancia y la inteligencia artificial. En lo referente al aprendizaje personalizado hablaron sobre las plataformas de aprendizaje adaptativo y las tutorías virtuales, dieron ejemplos de ambos como Khan Academy para el primero y TutorMe para el segundo. Sobre el aprendizaje a distancia, se habló de los cursos en línea masivos abiertos o MOOCs, que son gratuitos y pueden ser tomados por cualquier persona, como los de Coursera, por ejemplo. Y se habló del aprendizaje basado en proyectos, que permite a los estudiantes colaborar a nivel global a través de plataformas como Project Zero o ePals. En cuanto a inteligencia artificial, el centro de la conversación estuvo en torno a los chatbots educativos, como Duolingo y la realidad virtual y aumentada.
Estuviste en otras sesiones, como la de “Industry-based Training Skills”. ¿Qué se habló en ella?
Se centró en la importancia de que las instituciones educativas brinden a los estudiantes las habilidades que necesitan para tener éxito en el mercado laboral actual. Se destacaron puntos como la brecha entre las habilidades que tienen los estudiantes y las habilidades que necesitan los empleadores, la importancia de la formación práctica y la responsabilidad de las instituciones educativas de trabajar con los empleadores para identificar las habilidades que necesitan los alumnos.
¿Se habló de cómo pueden las universidades trabajar con la industria para desarrollar programas de formación más relevantes?
Sí, se mencionaron estrategias como la de crear consejos que puedan ayudar a las universidades a identificar las habilidades que necesitan los empleadores y a desarrollar programas de formación que satisfagan esas necesidades; ofrecer prácticas y pasantías a los estudiantes; desarrollar programas de aprendizaje; colaborar con los empleadores en la investigación y el desarrollo; y ofrecer programas de formación continua.
Además de estas estrategias, también se mencionó la importancia de que las universidades sean flexibles y adaptables a las necesidades cambiantes de la industria. Las universidades deben estar dispuestas a revisar y actualizar sus programas de formación con regularidad para asegurarse de que están brindando a los estudiantes las habilidades que necesitan para tener éxito en el mercado laboral actual.
¿Qué ejemplos se mencionaron de universidades que están trabajando exitosamente con la industria?
Se mencionó a la Universidad de Stanford, que ha creado un programa llamado "Stanford in the Valley" que permite a los estudiantes trabajar en proyectos con empresas de Silicon Valley. El MIT tiene un programa llamado "MITx" que ofrece cursos en línea gratuitos a estudiantes de todo el mundo. Estos cursos están diseñados para brindar a los estudiantes las habilidades que necesitan para tener éxito en la economía global.
¿Qué habilidades se destacaron como las más importantes para el futuro del trabajo en los mercados emergentes?
Se destacaron habilidades técnicas, como la competencia digital y el análisis de datos. Habilidades blandas, como el pensamiento crítico y la capacidad de expresar ideas de manera clara y concisa. La capacidad de trabajo en equipo, la creatividad y la adaptabilidad. También se mencionó la importancia de que los estudiantes desarrollen una mentalidad emprendedora, que incluye la capacidad de identificar oportunidades, tomar riesgos y tomar decisiones independientes.
¿Qué ideas se compartieron sobre cómo las universidades pueden rediseñar sus programas para preparar mejor a los estudiantes para estas habilidades?
Se compartieron varias ideas. Una de ellas fue la enfocarse en el aprendizaje experiencial, implementando prácticas, pasantías y proyectos de aprendizaje. Crear programas de formación en colaboración con empresas, invertir en tecnología y buscar el desarrollo de habilidades transversales, como las que te comenté en la pregunta anterior.
Sobre la importancia de la empleabilidad, ¿qué temas claves se tocaron?
Como comenté antes, existe una brecha entre las habilidades requeridas por el mercado laboral y las que poseen los estudiantes. En la conferencia se destacó la necesidad de cerrar esa brecha mediante programas educativos más alineados con las demandas de la industria y estudios que permitan reconocer esas demandas. Se enfatizó mucho en la importancia de proporcionar experiencias prácticas a los estudiantes, para que puedan adquirir habilidades aplicables directamente con el entorno laboral y en promover la inversión en tecnología que facilite el aprendizaje y la retroalimentación efectiva, para mejorar la preparación de los estudiantes y su adaptabilidad a entornos laborales en constante evolución.
¿Cuáles fueron las principales tendencias en tecnología educativa que se discutieron en el evento?
Las principales tendencias en tecnología educativa discutidas en el evento incluyeron el crecimiento del aprendizaje en línea, impulsado por plataformas como MOOCs y cursos en línea que ofrecen flexibilidad y accesibilidad; el uso creciente de la inteligencia artificial para personalizar el aprendizaje y automatizar tareas administrativas; la implementación de realidad virtual y aumentada para experiencias inmersivas; el desarrollo del aprendizaje adaptativo mediante algoritmos personalizados; la adopción de microcredenciales y blockchain para registrar logros educativos de manera segura y transparente; el uso de mecánicas de juego en el aprendizaje para mayor participación; el fomento del aprendizaje social a través de la interacción entre estudiantes; el análisis de big data para mejorar el aprendizaje; y la integración del Internet de las cosas para crear entornos de aprendizaje más inteligentes mediante la conexión de dispositivos y sensores.
¿Cómo puede la tecnología educativa ayudar a mejorar la calidad de la educación?
Luego de todo lo escuchado en esta conferencia, me queda claro que la tecnología da acceso a una mayor cantidad de contenido y formas más personalizadas de aprendizaje. La posibilidad de brindarle retroalimentación a los estudiantes marca una gran diferencia y el poder automatizar tareas administrativas, deja tiempo para mejorar programas necesarios que ayuden a los alumnos en diversos aspectos.
¿Se mencionaron ejemplos de universidades que están utilizando la tecnología educativa de manera innovadora? Si lo hicieron, ¿cuáles fueron?
Sí, nuevamente se mencionó a Stanford, porque utilizan la realidad virtual para crear experiencias de aprendizaje inmersivas para los estudiantes de medicina. El MIT utiliza el aprendizaje basado en juegos en ingeniería y diseño; la Universidad de Oxford está utilizando la tecnología educativa para crear un "campus virtual" que permitirá a los estudiantes aprender de cualquier lugar del mundo y Harvard está utilizando la tecnología educativa para crear un "laboratorio de aprendizaje" donde los estudiantes podrán experimentar con nuevas tecnologías y métodos de aprendizaje.
¿Cuáles fueron las principales conclusiones del evento?
En primer lugar, la necesidad de que las instituciones educativas se adapten a la transformación tecnológica, reconociendo el potencial de la tecnología educativa para mejorar la calidad de la enseñanza. Luego, la importancia de la colaboración entre instituciones educativas, gobiernos y empresas para aprovechar al máximo este potencial. Otro punto sumamente importante es la creciente relevancia de habilidades transversales como el pensamiento crítico y la creatividad en el futuro laboral, y la necesidad de que las universidades preparen a los estudiantes para ello. La empleabilidad, la internacionalización y la sostenibilidad también emergieron como preocupaciones clave, instando a las universidades a colaborar con empleadores, ofrecer oportunidades internacionales y promover la sostenibilidad en los planes de estudio y operaciones.
¿Qué recomendaciones harías a las universidades en función de lo que aprendiste en el evento?
Basándome en lo aprendido, mis recomendaciones para las universidades son las siguientes: en primer lugar, adoptar la tecnología educativa para mejorar la calidad del aprendizaje y facilitar experiencias inmersivas y personalizadas; luego, enfocarse en el desarrollo de habilidades transversales clave para el futuro laboral; además, trabajar en estrecha colaboración con empleadores para garantizar la relevancia y la empleabilidad de los graduados. Asimismo, ofrecer oportunidades de aprendizaje internacional y priorizar la sostenibilidad en los planes de estudio y operaciones son aspectos esenciales. Por último, recomiendo que las universidades sean innovadoras y colaborativas, abiertas a la experimentación y al trabajo conjunto con gobiernos, empresas y otras instituciones educativas para maximizar el potencial de la educación superior.
¿Cómo podemos seguir impulsando la empleabilidad y el éxito estudiantil en el sector educativo?
Para impulsar la empleabilidad y el éxito estudiantil en el sector educativo, se pueden utilizar diferentes estrategias. Esto incluye fortalecer la formación práctica a través de programas de pasantías y proyectos experienciales, así como desarrollar habilidades transversales valoradas por los empleadores. También es crucial fomentar la vinculación con el sector productivo, brindar orientación individualizada, promover la cultura emprendedora y modernizar la infraestructura educativa con tecnologías que faciliten el aprendizaje personalizado. Además, se deben fortalecer la formación docente, implementar programas de seguimiento y evaluación, reducir la brecha de género y promover la educación inclusiva. Cuando se aplican de forma consistente, estas estrategias pueden mejorar mucho la empleabilidad y el éxito estudiantil, preparándolos para el futuro del mercado laboral.
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